Notielcristiano.- Más de 2.000
millones de cristianos tiene una imagen mental de Jesucristo; un hombre de piel
blanca, con barba, cabello largo, claro, y ojos azules, pero es muy probable
que ese no fuera su aspecto.
En la biblia no hay ninguna referencia sobre
la apariencia del hijo de Dios, las primeras representaciones que se hicieron
de él son del siglo III y lo muestran con barba, cabello corto, oscuro (marrón,
tal vez negro), piel morena y es que esa es la apariencia de los hombres que
habitaron la zona de palestina en esa época, Jesús era un hombre que recorría
territorios, incluso desiertos.
La imagen que se masificó y
generalizó surgió a partir del siglo IV DC, y al no haber en la biblia ninguna
especificación, ni indicio de cómo lucía, se impuso el eurocentrismo haciendo una imagen semejante a los
reyes y emperadores de la época, de hecho, inspirada en el dios de la mitología
Zeus; lo que no se corresponde con el aspecto de un hombre de Galilea en el
siglo I.
En el pasaje de la Biblia; cuando Judas llega a con los soldados que van
a arrestar a Jesús, a este lo identifican solo cuando Judas lo besa; lo que
sugiere que no destacaba del resto de sus discípulos, bien podría ser porque
era un típico hombre del medio oriente.
Jesús era un judío, y un judío común de esa
época en Palestina era moreno, de estatura aproximada de 1.60, cabello corto y
barba recortada; porque no era bien visto tener el cabello largo en ese entonces, y
los ojos negros o marrones, esos hombres son biológicamente
similares a los judíos iraquíes de la actualidad.
Las representaciones que se
masificaron buscaban resaltar su divinidad de Jesús, el cristo, el hijo de Dios, pero la
lógica va en otra dirección; su condición humana le imprime más fuerza a esa
teoría y la biblia no da ninguna pista para tener una certeza sobre la apariencia real de Jesús.
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