Notielcristiano. - luego de la cena de pascua con los discípulos, Jesús se fue a orar en el huerto de Getsemaní, ahí lo encontró Judas Iscariote quien iba con los soldados romanos, sacerdotes del Sanedrín y un grupo de gente armada con palos y antorchas.
Jesús sabía lo que iba a suceder y les salió al encuentro:
¿A quién buscáis? -les dijo-
A Jesús el Nazareno, respondieron.
Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra.
Volvió, pues, a preguntarles: ¿A quién buscáis?
Y ellos dijeron: A Jesús nazareno.
Respondió Jesús: Os he dicho que yo soy; pues si me buscáis a mí, dejad ir a estos.
Uno de sus discípulos intentó resistir con violencia, pero Jesús tomó el control de la situación y se entregó. Seguidamente lo aprendieron y ataron. Durante toda la noche lo llevaron de un lado a otro hasta que lograron lo que buscaban, su muerte.
En aquella época, el Imperio romano concedía a las autoridades religiosas judías, (conocidas como el sanedrín, conformado por 71 miembros del pueblo de Israel) el derecho de administrar justicia entre el pueblo según sus propias leyes, pero no les confería el derecho legal para ejecutar prisioneros.
Fueron entonces con los romanos para que ejecutaran la sentencia. Pilatos los recibió y tras un breve desacuerdo interrogó a Jesús, pidió que lo golpearan y después lo envió con Herodes Antipas, allí también fue interrogado, golpeado y humillado por los soldados de Herodes quienes lo vistieron con un manto y le colocan la corona de espinas.
De vuelta con Pilatos, finalmente se emite la sentencia presionado por un grupo de personas que acompañaba al sanedrín. Así que sería crucificado.
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