Prensa El Cristiano.- Cuando entró Jesús de Nazaret al tiempo, se
convirtió en el verbo de Dios hecho carne. Jesús el Hijo de Dios vino al mundo
para acercar a la humanidad al cielo, origen del Padre.
El apóstol Juan, primo de Jesús
de Nazaret, quien lo apodó Hijo de Trueno, por su carácter vehemente y violento
señaló que “el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era
Dios” (Ju. 1:1).
Como Dios es luz, pues su
primogénito Cristo igual iluminó al mundo cuando estuvo en la tierra, así pues,
cuando buscas de Jesús de Nazaret te aferras a él, es porque buscas esa luz de
Dios.
Juan inspirado con el Espíritu
Santo reveló el origen, él fue comerciante, y socio de una pesquera importante
en Capernaum. Su vida era normal tenía su propia vivienda en Jerusalén cuando
caminó con Jesús de Nazaret.
Hace 95 años d. C. el apóstol
Juan escribió desde Éfeso, ciudad situada en Asia Menor, hoy conocida como
Turquía la carta de Juan, la cual dirigió a los seguidores de Jesús, quienes no
eran judíos. Murió de vejez luego de redactar el texto de la vida de Jesús.
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